Ver en: https://docs.google.com/file/d/0B_AeQb4748LlRGlQUzFoUjktTFE/edit?usp=sharing
La conjugación
verbal
Aprendiendo la conjugación de los
verbos
La
conjugación o flexión verbal hace referencia a
las diversas formas que un verbo puede tener
atendiendo a las variaciones de tiempo, persona,
número y modo.
La palabra conjugar deriva del latin coniugāre y significa la combinación de varias cosas entre sí.
Los verbos conjugados combinan sus modificaciones de tiempo, de persona, de número y modo.
Para entender mejor lo que significa la conjugación verbal, en las siguientes oraciones se ilustra tres formas conjugadas del verbo comer.
José come en el restaurante vegetariano todos los días.
Andrés comió una hamburguesa.
Antonia comerá una pizza esta noche.
El verbo comer se encuentra aquí conjugado en los tres tiempos básicos:
Presente (come)
Pretérito perfecto (comió) y en
Futuro (comerá)
Los tres tipos de conjugaciones: El infinitivo.
El infinitivo es una forma no personal del verbo y se caracteriza por terminar en ar, er, o ir.
Ejemplos de infinitivo: amar, temer, partir.
Estos tres tipos de infinitivos son los que determinan los tres grandes grupos de conjugaciones.
Cada una de estas formas tiene una particular forma de ser conjugada.
Es decir todos los infinitivos que terminan en ar- se conjugan siguiendo las mismas reglas.
Lo mismo ocurre con los infinitivos terminados en er, e ir.
En la tabla de conjugación que se encuentra al final de este artículo se muestra los tres grandes grupos citados conjugados en los tiempos del modo indicativo.
Los modos verbales.
Cada verbo conjugado se encuentra en un determinado modo verbal. Existen cuatro modos, los cuales son: modo indicativo, subjuntivo, condicional e imperativo.
Cada modo del verbo se conjuga de una determinada manera. Por ejemplo, la conjugación en el tiempo presente y en primera persona del verbo amar, en el modo indicativo es amo. En cambio, en el modo subjuntivo se conjuga como ame.
Los tiempos verbales.
Todos los verbos al estar conjugados se expresan en un momento específico.
Por eso existen verbos en tiempo presente, en tiempo pretérito, o en tiempo futuro.
El número.
El número del verbo ser refiere a la cantidad de personas que realizan la acción.
Puede ser singular o plural.
La persona de los verbos.
La persona en los verbos es simplemente quien realiza la acción del verbo. Existen tres clases de persona: primera, segunda y tercera, los cuales a su vez pueden estar en número singular o plural.
Verbos irregulares.
Los verbos irregulares son aquellos cuya conjugación no se ajusta a los modelos de amar, temer o partir. Dichos verbos al conjugarse modifican su raíz. Ejemplo: pedir, al estar conjugado en primera persona del tiempo presente del indicativo, se escribe como pido.
Formas no personales del verbo.
Las formas no personales del verbo carecen de desinencias. Es decir, no cuentan con las variaciones de persona, de número ni de modo.
Las formas no personales del verbo son los infinitivos, los gerundios, y los participios.
Ejemplos: estar (infinitivo), comiendo (gerundio), comido (participio).
La palabra conjugar deriva del latin coniugāre y significa la combinación de varias cosas entre sí.
Los verbos conjugados combinan sus modificaciones de tiempo, de persona, de número y modo.
Para entender mejor lo que significa la conjugación verbal, en las siguientes oraciones se ilustra tres formas conjugadas del verbo comer.
José come en el restaurante vegetariano todos los días.
Andrés comió una hamburguesa.
Antonia comerá una pizza esta noche.
El verbo comer se encuentra aquí conjugado en los tres tiempos básicos:
Presente (come)
Pretérito perfecto (comió) y en
Futuro (comerá)
Los tres tipos de conjugaciones: El infinitivo.
El infinitivo es una forma no personal del verbo y se caracteriza por terminar en ar, er, o ir.
Ejemplos de infinitivo: amar, temer, partir.
Estos tres tipos de infinitivos son los que determinan los tres grandes grupos de conjugaciones.
Cada una de estas formas tiene una particular forma de ser conjugada.
Es decir todos los infinitivos que terminan en ar- se conjugan siguiendo las mismas reglas.
Lo mismo ocurre con los infinitivos terminados en er, e ir.
En la tabla de conjugación que se encuentra al final de este artículo se muestra los tres grandes grupos citados conjugados en los tiempos del modo indicativo.
Los modos verbales.
Cada verbo conjugado se encuentra en un determinado modo verbal. Existen cuatro modos, los cuales son: modo indicativo, subjuntivo, condicional e imperativo.
Cada modo del verbo se conjuga de una determinada manera. Por ejemplo, la conjugación en el tiempo presente y en primera persona del verbo amar, en el modo indicativo es amo. En cambio, en el modo subjuntivo se conjuga como ame.
Los tiempos verbales.
Todos los verbos al estar conjugados se expresan en un momento específico.
Por eso existen verbos en tiempo presente, en tiempo pretérito, o en tiempo futuro.
El número.
El número del verbo ser refiere a la cantidad de personas que realizan la acción.
Puede ser singular o plural.
La persona de los verbos.
La persona en los verbos es simplemente quien realiza la acción del verbo. Existen tres clases de persona: primera, segunda y tercera, los cuales a su vez pueden estar en número singular o plural.
Verbos irregulares.
Los verbos irregulares son aquellos cuya conjugación no se ajusta a los modelos de amar, temer o partir. Dichos verbos al conjugarse modifican su raíz. Ejemplo: pedir, al estar conjugado en primera persona del tiempo presente del indicativo, se escribe como pido.
Formas no personales del verbo.
Las formas no personales del verbo carecen de desinencias. Es decir, no cuentan con las variaciones de persona, de número ni de modo.
Las formas no personales del verbo son los infinitivos, los gerundios, y los participios.
Ejemplos: estar (infinitivo), comiendo (gerundio), comido (participio).
Las
formas no personales del
verbo son el infinitivo, el gerundio, y el participio. Son llamadas
formas no personales por carecer de una forma
que indique su persona, número, modo o tiempo. Dichas
formas no pertenecen a la conjugación verbal.
Sin embargo, dichas formas poseen aspecto, como el caso del gerundio, el cual tiene un aspecto imperfecto y el participio, el cual es perfecto.
No ocurre lo mismo en el caso del infinitivo, es decir, el cual no posee un aspecto determinado.
El infinitivo.
El infinitivo es una forma no personal del verbo caracterizado por terminar siempre ar-er o ir.
Los infinitivos son muy importantes a la hora de conocer las reglas para conjugar los verbos. Cada modelo de infinitivo, es decir, cada verbo terminado en ar, er o ir se conjuga siguiendo unas reglas comunes para cada caso. Por tanto, aprenderemos cómo se conjugan cada uno de estos tres infinitivos, también aprenderemos cómo conjugar otros verbos, aplicando las reglas de conjugación del tipo de infinitivo de que se trate.
Ejemplos de infinitivos terminados en ar: cantar, estar, maniobrar, evolucionar.
Ejemplos de infinitivos terminados en er: temer, satisfacer, correr.
Ejemplos de infinitivos terminados en ir: partir, freír, combatir, emitir.
El gerundio.
El gerundio es una forma no personal del verbo caracterizado por expresar una acción continua, en desarrollo constante.
Ejemplos de gerundios: Andrea está corriendo. El gerundio posee un aspecto imperfecto porque está expresando una acción no terminada.
Otros ejemplos de gerundio: Esther está estudiando.
Mi amigo se la pasa entrenando para el maratón.
Juan se la pasa leyendo casi todo el dia.
El participio.
El participio es otra forma no personal del verbo que indica la acción tras haber finalizado. Los participios se forman añadiendo los sufijos -ado o ido-, dependiendo de la conjugación del verbo.
Ejemplos de participio:
Mi hermano ha concluido sus estudios universitarios.
Mi padre ha participado del concierto.
Sin embargo, dichas formas poseen aspecto, como el caso del gerundio, el cual tiene un aspecto imperfecto y el participio, el cual es perfecto.
No ocurre lo mismo en el caso del infinitivo, es decir, el cual no posee un aspecto determinado.
El infinitivo.
El infinitivo es una forma no personal del verbo caracterizado por terminar siempre ar-er o ir.
Los infinitivos son muy importantes a la hora de conocer las reglas para conjugar los verbos. Cada modelo de infinitivo, es decir, cada verbo terminado en ar, er o ir se conjuga siguiendo unas reglas comunes para cada caso. Por tanto, aprenderemos cómo se conjugan cada uno de estos tres infinitivos, también aprenderemos cómo conjugar otros verbos, aplicando las reglas de conjugación del tipo de infinitivo de que se trate.
Ejemplos de infinitivos terminados en ar: cantar, estar, maniobrar, evolucionar.
Ejemplos de infinitivos terminados en er: temer, satisfacer, correr.
Ejemplos de infinitivos terminados en ir: partir, freír, combatir, emitir.
El gerundio.
El gerundio es una forma no personal del verbo caracterizado por expresar una acción continua, en desarrollo constante.
Ejemplos de gerundios: Andrea está corriendo. El gerundio posee un aspecto imperfecto porque está expresando una acción no terminada.
Otros ejemplos de gerundio: Esther está estudiando.
Mi amigo se la pasa entrenando para el maratón.
Juan se la pasa leyendo casi todo el dia.
El participio.
El participio es otra forma no personal del verbo que indica la acción tras haber finalizado. Los participios se forman añadiendo los sufijos -ado o ido-, dependiendo de la conjugación del verbo.
Ejemplos de participio:
Mi hermano ha concluido sus estudios universitarios.
Mi padre ha participado del concierto.
Desinencia
verbal
Definición:
La
desinencia verbal
es una de las partes del verbo.
El verbo posee dos partes bien diferenciadas: la raíz y la desinencia.
Ejemplo:
El verbo jugó tiene como raíz a la parte que nunca varía del mismo: jug-.
Por tanto, la desinencia verbal está siempre situada en la parte final, en este caso, la desinencia es la letra o.
Las desinencias verbales tienen gran importancia porque sirven para indicar los accidentes gramaticales del verbo.
Otros ejemplos:
compró
despertará
llegaré
comparte
habló
lee
El verbo posee dos partes bien diferenciadas: la raíz y la desinencia.
Ejemplo:
El verbo jugó tiene como raíz a la parte que nunca varía del mismo: jug-.
Por tanto, la desinencia verbal está siempre situada en la parte final, en este caso, la desinencia es la letra o.
Las desinencias verbales tienen gran importancia porque sirven para indicar los accidentes gramaticales del verbo.
Otros ejemplos:
compró
despertará
llegaré
comparte
habló
lee
La
raíz verbal es
una de las dos partes del verbo y se
caracteriza por expresar el signficado del mismo.
Todos los verbos tienen una determinada raíz verbal que se obtiene suprimiendo la terminación ar, er o ir que ese verbo posee cuando es un infinitivo.
La otra parte es la desinencia verbal.
Mientras que las distintas variaciones que pueden presentar las desinencias verbales tienen directa relación con los accidentes gramaticales, la raíz de un verbo se mantiene invariable en su ortografía y siempre tienen la función de expresar el significado o contenido lexico de dicho verbo.
Ejemplos de raíces verbales:
El verbo apareció tiene como infinitvo aparecer. Al suprimirle la terminación er, tenemos que su raíz verbal es apare
El verbo tecleó tiene como infinitvo a teclear. Al suprimirle la terminación ar tenemos que su raíz verbal es tecle
El verbo jugaba tiene como infinitivo a jugar. Al suprimirle la terminación ar tenemos que su raíz verbal es jug
El verbo temería tiene como infinitivo a temer. Al suprimirle la terminación er, tenemos que su raíz verbal es tem
El verbo vivía, tiene como infinitivo a vivir. Al suprimirle la terminación ir, tenemos que su raíz verbal es viv
El verbo llegaría tiene como infinitivo a llegar. Al suprimirle la terminación ar, tenemos que su raíz verbal es lleg.
Las raíces verbales tecle, jug, tem, viv, y lleg se mantienen siempre iguales. Es decir, las mismas no varían en su ortografía porque no son afectadas por las diferencias que puedan existir en el modo de los verbos o de otras alteraciones de los accidentes gramaticales.
La raíz verbal es, por tanto, invariable.
Los accidentes gramaticales del verbo
Todos los verbos tienen una determinada raíz verbal que se obtiene suprimiendo la terminación ar, er o ir que ese verbo posee cuando es un infinitivo.
La otra parte es la desinencia verbal.
Mientras que las distintas variaciones que pueden presentar las desinencias verbales tienen directa relación con los accidentes gramaticales, la raíz de un verbo se mantiene invariable en su ortografía y siempre tienen la función de expresar el significado o contenido lexico de dicho verbo.
Ejemplos de raíces verbales:
El verbo apareció tiene como infinitvo aparecer. Al suprimirle la terminación er, tenemos que su raíz verbal es apare
El verbo tecleó tiene como infinitvo a teclear. Al suprimirle la terminación ar tenemos que su raíz verbal es tecle
El verbo jugaba tiene como infinitivo a jugar. Al suprimirle la terminación ar tenemos que su raíz verbal es jug
El verbo temería tiene como infinitivo a temer. Al suprimirle la terminación er, tenemos que su raíz verbal es tem
El verbo vivía, tiene como infinitivo a vivir. Al suprimirle la terminación ir, tenemos que su raíz verbal es viv
El verbo llegaría tiene como infinitivo a llegar. Al suprimirle la terminación ar, tenemos que su raíz verbal es lleg.
Las raíces verbales tecle, jug, tem, viv, y lleg se mantienen siempre iguales. Es decir, las mismas no varían en su ortografía porque no son afectadas por las diferencias que puedan existir en el modo de los verbos o de otras alteraciones de los accidentes gramaticales.
La raíz verbal es, por tanto, invariable.
Los accidentes gramaticales del verbo
Los
accidentes gramaticales hacen referencias a las desinencias de los verbos y los diferentes
significados que los mismos pueden expresar. Los accidentes gramaticales del
verbo son: modo, tiempo, persona, y número.
El
modo verbal expresa la relación que existe entre la actitud del hablante
y aquello que el mismo enuncia en la oración.
Existen tres modos principales del verbo y son:
El modo indicativo: Cuando un verbo se encuentra en el modo indicativo está refiriéndose a la realización de una acción concreta y real.
Por ejemplo, si digo “Analía cantó muy bien”, dicha oración nos informa de un hecho real y particular, detalla que esa persona, Analía, cantó muy bien.
No sería lo mismo decir que, “Esperemos que Analía cante muy bien”, ya que, en ese caso estaríamos manifestando un deseo.
Es decir, no es un hecho concreto y real, sino una probabilidad.
El segundo ejemplo se encuentra no en el modo indicativo sino en el subjuntivo.
El modo subjuntivo: Cuando el verbo se refiere a una acción que se considera como posible, aún no concretada, entonces dicho verbo se encuentra en el modo subjuntivo.
Ejemplos:
Ojala podamos asistir a su graduación.
Todos querían que él realice una brillante exposición.
El modo imperativo: Empleamos el modo imperativo de los verbos cuando queremos dirigir órdenes.
Ejemplos: Venid aquí.
Acomódate en ese asiento.
¡Haz silencio, estamos en una reunión!
Los tiempos verbales.
La acción realizada por el verbo se encuentra en un momento determinado. Puede tratarse de un momento pasado, presente o futuro. Por eso se les llama los tiempos verbales. Existen tres grandes tiempos y son:
Tiempo pasado: expresa una acción ya realizada.
Ejemplo: Juan comió.
Tiempo presente: La acción se está realizando actualmente.
Ejemplo: Juan corre.
Tiempo futuro: Lo expresado por el verbo aún no ocurre, sino que ocurrirá posteriormente. Ejemplo: El lunes Julia bailará en el teatro.
El número.
Cuando la acción que expresa el verbo es realizada por un solo sujeto, el número es singular. Si la acción expresada hace referencia a varios sujetos, el número es plural.
Ejemplos en singular:
Me gusta ir de paseo por el parque. Alberto es un gran nadador. Su comportamiento es muy sereno.
Ejemplos en plural:
Antonio y yo asistiremos a la fiesta de cumpleaños.
Debemos caminar diez cuadras para llegar a la escuela.
Ellos van a cantar una obra en el nuevo teatro.
La persona.
La persona indica la relación que existe entre el verbo y el sujeto que realiza la acción que el verbo expresa. La persona puede estar en primera, segunda o tercera persona.
Primera persona: Cuando la acción expresada es realizada por la misma persona quien habla en la oración, se dice que está en primera persona. Dependiendo de quién o quiénes realizan dicha acción, la primera persona puede estar en singular o plural.
Ejemplos: Yo entreno todas las mañanas Me encanta la música pop.
Todos los días voy al conservatorio para mis clases de violín.
Nosotros comemos pasta todos los viernes.
Todos quedamos contentos con su ponencia.
En estas oraciones, el sujeto de la oración es la persona que relata el hecho, es el protagonista de la misma.
Segunda persona: La forma verbal se encuentra en segunda persona cuando la acción es realizada por una persona, animal o cosa que es distinta del hablante.
En la oración “Tú eres una persona muy estudiosa” la persona que está expresando dicho enunciado se está refiriendo a otra y no a sí misma como sucede cuando la forma verbal está en primera persona.
Es decir, está diciendo a quien le está escuchando que es alguien muy estudioso.
Otros ejemplos:
Cantas extraordinariamente bien.
Juan, eres buen jugador de futbol en su club.
Tercera persona: Si el verbo expresado no se refiere ni al hablante ni al oyente, entonces la forma verbal es la tercera persona.
Cuando decimos que “Ella es una actriz muy buena” estamos hablando de alguien ajeno a la oración.
Otros ejemplos:
Todos los días mi vecino practica cómo cantar.
Ellos arribarán este viernes a la ciudad.
Sus libros han vendido muy bien.
Existen tres modos principales del verbo y son:
El modo indicativo: Cuando un verbo se encuentra en el modo indicativo está refiriéndose a la realización de una acción concreta y real.
Por ejemplo, si digo “Analía cantó muy bien”, dicha oración nos informa de un hecho real y particular, detalla que esa persona, Analía, cantó muy bien.
No sería lo mismo decir que, “Esperemos que Analía cante muy bien”, ya que, en ese caso estaríamos manifestando un deseo.
Es decir, no es un hecho concreto y real, sino una probabilidad.
El segundo ejemplo se encuentra no en el modo indicativo sino en el subjuntivo.
El modo subjuntivo: Cuando el verbo se refiere a una acción que se considera como posible, aún no concretada, entonces dicho verbo se encuentra en el modo subjuntivo.
Ejemplos:
Ojala podamos asistir a su graduación.
Todos querían que él realice una brillante exposición.
El modo imperativo: Empleamos el modo imperativo de los verbos cuando queremos dirigir órdenes.
Ejemplos: Venid aquí.
Acomódate en ese asiento.
¡Haz silencio, estamos en una reunión!
Los tiempos verbales.
La acción realizada por el verbo se encuentra en un momento determinado. Puede tratarse de un momento pasado, presente o futuro. Por eso se les llama los tiempos verbales. Existen tres grandes tiempos y son:
Tiempo pasado: expresa una acción ya realizada.
Ejemplo: Juan comió.
Tiempo presente: La acción se está realizando actualmente.
Ejemplo: Juan corre.
Tiempo futuro: Lo expresado por el verbo aún no ocurre, sino que ocurrirá posteriormente. Ejemplo: El lunes Julia bailará en el teatro.
El número.
Cuando la acción que expresa el verbo es realizada por un solo sujeto, el número es singular. Si la acción expresada hace referencia a varios sujetos, el número es plural.
Ejemplos en singular:
Me gusta ir de paseo por el parque. Alberto es un gran nadador. Su comportamiento es muy sereno.
Ejemplos en plural:
Antonio y yo asistiremos a la fiesta de cumpleaños.
Debemos caminar diez cuadras para llegar a la escuela.
Ellos van a cantar una obra en el nuevo teatro.
La persona.
La persona indica la relación que existe entre el verbo y el sujeto que realiza la acción que el verbo expresa. La persona puede estar en primera, segunda o tercera persona.
Primera persona: Cuando la acción expresada es realizada por la misma persona quien habla en la oración, se dice que está en primera persona. Dependiendo de quién o quiénes realizan dicha acción, la primera persona puede estar en singular o plural.
Ejemplos: Yo entreno todas las mañanas Me encanta la música pop.
Todos los días voy al conservatorio para mis clases de violín.
Nosotros comemos pasta todos los viernes.
Todos quedamos contentos con su ponencia.
En estas oraciones, el sujeto de la oración es la persona que relata el hecho, es el protagonista de la misma.
Segunda persona: La forma verbal se encuentra en segunda persona cuando la acción es realizada por una persona, animal o cosa que es distinta del hablante.
En la oración “Tú eres una persona muy estudiosa” la persona que está expresando dicho enunciado se está refiriendo a otra y no a sí misma como sucede cuando la forma verbal está en primera persona.
Es decir, está diciendo a quien le está escuchando que es alguien muy estudioso.
Otros ejemplos:
Cantas extraordinariamente bien.
Juan, eres buen jugador de futbol en su club.
Tercera persona: Si el verbo expresado no se refiere ni al hablante ni al oyente, entonces la forma verbal es la tercera persona.
Cuando decimos que “Ella es una actriz muy buena” estamos hablando de alguien ajeno a la oración.
Otros ejemplos:
Todos los días mi vecino practica cómo cantar.
Ellos arribarán este viernes a la ciudad.
Sus libros han vendido muy bien.
Lecturas recomendadas
Artículos
en nuestra red
Orlando Cáceres Ramírez
Guía de Ortografía y redacción
Guía de Ortografía y redacción
Modos y tiempos
verbales en español
En este artículo tratamos el
uso de los modos y tiempos de los verbos.
En castellano los verbos se
conjugan en cuatro modos: indicativo, subjuntivo, condicional e imperativo.
Cada modo tiene uno o más tiempos y tiempos compuestos. Lea más si quiere
aprender cómo utilizar los modos y los tiempos.
Modo indicativo
El modo indicativo se utiliza
para describir el mundo de la realidad: qué es (presente), qué era (pretérito),
qué será (futuro).
Presente
Se utiliza para expresar
acciones que tienen lugar en el momento en que se habla. Por ejemplo:
Se utiliza para expresar
acciones que ocurren frecuentemente. Por ejemplo:
Se puede utilizar para
expresar acciones futuras. Por ejemplo:
Se utiliza para expresar
órdenes. Por ejemplo:
Se puede utilizar para
referirse a acciones pasadas. Por ejemplo:
Pretérito imperfecto
Se utiliza para describir una
acción que se desarrolla en el pasado, sin indicar si ha finalizado o no,
mientras que el pretérito
perfecto nos dice que la acción ya ha concluido. Por ejemplo:
<<Ejemplo>>
Se utiliza para hablar de
acciones habituales del pasado. Por ejemplo:
Se utiliza para dar detalles,
como: tiempo, ubicación, hora, años, sentimientos, características mentales y
físicas.
Hacía frío durante
la noche.
Pretérito indefinido
Se llama también pretérito perfecto simple.
Se utiliza para hablar de hechos pasados. Siempre son acciones terminadas.
Se utiliza para hablar de hechos pasados. Siempre son acciones terminadas.
Suelen utilizarse las
siguientes expresiones temporales con el pretérito indefinido: ayer, anteayer, anoche, una vez, dos veces, la semana pasada, etc.
Se puede encontrar el pretérito
indefinido y el imperfecto en la misma frase.
Futuro
Se utiliza para hablar de
acciones posteriores al tiempo en que se habla. Siempre existe una dosis de
incertidumbre. Nunca se puede estar seguro de la realización de la acción
descrita. Por ejemplo:
El tiempo futuro se utiliza
también para expresar...
...especulaciones del tiempo presente:
...especulaciones del tiempo presente:
...una probabilidad del tiempo
presente:
Serán las cuatro.
...una citación indirecta:
Modo subjuntivo
El modo subjuntivo se utiliza
para expresar conceptos que son hipotéticos, contrario al hecho, los que
incorporen la expresión de las sensaciones del orador hacia un estado o una
acción.
Presente
Se utiliza para expresiones con
ser + adjetivo
donde no se indica el hecho, sino la opinión del orador hacia un estado o una
acción hipotético. Por ejemplo:
En los siguentes ejemplos se
utiliza indicativo, porque se indica el hecho o la certeza de un hecho.
Pero:
Se utiliza subjuntivo detrás de
expresiones de:
deseo
|
Quiero que...,
Ojalá que...
|
mandato
|
|
petición
|
|
consejo
|
|
prohibición
|
|
sugestión
|
|
invitación
|
|
insistencia
|
Insisto que...
|
exigencia
|
Exijo que..
|
Pretérito imperfecto
Cuando el verbo del que depende
el subjuntivo va en pretérito indefinido, imperfecto, pluscuamperfecto o
condicional, tenemos que usar el pretérito imperfecto de subjuntivo. Por
ejemplo:
Futuro
En el subjuntivo ya no se
utiliza el tiempo futuro mucho. Por eso no tratamos el uso de este tiempo.
<<Más información>>
Modo condicional
El modo condicional se utiliza
para expresar incertidumbre, particularmente (pero no exclusivamente) en
oraciones condicionales.
El modo condicional, en ocasiones,
se considera un tiempo en lugar de un modo.
Modo imperativo
El modo imperativo expresa una
orden, solicitud o prohibición.
Hay dos tipos de imperativo:
Hay dos tipos de imperativo:
Afirmativo
por ejemplo:
Siéntese usted.
Negativo
por ejemplo:
Tiempos compuestos
Pretérito perfecto
Se utiliza para expresar una
acción pasada pero cercana a un presente; suelen utilizarse las siguientes
expresiones temporales: hoy,
esta mañana, este mes, este fin de semana. La
forma: haber (presente) + participio. Por
ejemplo:
Pretérito pluscuamperfecto
Se utiliza para expresar
acciones pasadas, realizadas en un momento dado del pasado. La forma: haber (pret.
imperfecto) + participio. Por ejemplo:
Pretérito anterior
<<Todavía no está>>
<<ejemplo
con 'hube hablado'>>
Futuro compuesto
Se utiliza para expresar
acciones futuras, ocurridas con anterioridad a otra también futura. La forma: haber (futuro) + participio. Por
ejemplo:
Participio Presente / Gerundio
El gerundio es una conjugación
que termina con -iendo
o -ando. Muchas
veces es precedido por alguna forma del verbo auxiliar estar. Se
utiliza para expresar acciones que estan pasando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario